PRÓLOGO DE JOSE CARLOS FERNÁNDEZ GARCÍA
A lo largo de los siglos la
Humanidad ha experimentado una constante evolución, de forma lenta
pero inexorable nuestro organismo ha ido adaptándose para sobrevivir
en el ambiente de nuestro planeta.
En cambio podemos constatar que
en determinados momentos de la historia se han producido saltos
evolutivos claves en el intelecto humano. Casi siempre han sido
llevados a cabo por seres humanos que han revolucionado los
parámetros y condicionantes de su época con descubrimientos claves
en los diversos campos del saber, ya sean físicos o espirituales,
creando movimientos imparables que conseguían hacer avanzar a la
Humanidad.
Después de los últimos grandes
movimientos del siglo XIX la Humanidad ha conocido un increíble y
espectacular desarrollo sobre todo en el campo de la Ciencia, en
todas sus facetas, la Cultura, el Arte y la Política. A todo esto la
Religión en todas sus variantes y facetas ha intentado adaptarse a
las nuevas corrientes.
A tal grado ha llegado la
evolución en estos campos que hoy en dia está prácticamente
prohibido saltarse las reglas de las que estos grandes campos se han
dotado para, dicen, asegurar su correcta evolución.
Sin embargo la Historia nos ha
enseñado que es inevitable la aparición de seres humanos con
visiones amplias del entorno que nos rodea que pueden empezar a
constatar que la Humanidad se prepara para un nuevo salto evolutivo,
en este caso, espiritual o mental. Como siempre se iniciaría con
una o varias personas que de forma abrupta obtienen una brutal e
inesperada conciencia de que estamos prácticamente sojuzgados por
los diversos campos antes expuestos sin permitir éstos ninguna
desviación importante de sus normas y leyes inexorables.
A partir de vivencias personales
el Autor se rodea de una serie de entrañables personajes y nos
transporta a una cabaña solitaria donde nuestros miedos, complejos,
ataduras y por ende nuestra propia existencia son desmenuzados y
analizados sin piedad. Se nos muestran caminos y senderos por donde
transcurrir con salidas alternativas pero con un único fin. Nuestro
salto evolutivo ya está ahí, sólo hay que intuirlo, sentirlo,
entenderlo y por fin aplicarlo.
A veces con profundidad, otras
en tono jocoso el Autor nos desvela una serie de conocimientos que
sólo esperan a que alguien los recoja y empiece a evolucionarlos.
Una obra, en mi humilde opinión,
de obligada lectura y relectura.
Que ustedes lo disfruten.
zdgf
ResponderEliminarBuen inicio, ojala pudiera subir el libro completo.
ResponderEliminar